(Un espejismo gris)
dunas eternas descansan esperando
el viento no es viento
se hace brisa contemplando
se hace paz en cada sonrisa
solas las manos buscan encontrarse
(Un espejismo gris)
y luego el frío corteza de árbol
se avecina
mueve cimientos
agita el cielo
y como un cuadro abandonado
en girasoles y sepia
acoje todos los movimientos
se mezcla y nutre las venas
de miedo
(Un espejismo gris)
Llega la noche y queda el
cuerpo constelado
la boca asume el silencio
como señal de pasos ya caminados
(Un espejismo gris)
Amanece, los lirios
azucenas y jazmines
perfuman al respirar el alma
del pecho brotan gaviotas
se observa el vuelo raudo
y abajo las pinceladas de calle/piedra
los ojos en las paredes
la ventana y la cortina
el café, la mesa, felino ruido el del alba
(Un espejismo gris)
Espuma el mar palabras inintelegibles
las aves rojas beben sorbo a sorbo
el líquido enfermo y venenoso
calladas las otras esperan su vuelo/muerte
y otra vez a comer carroña
que vuelcan a la boca cerúlea
haciendo ofrenda de noche
al olvido
(Un espejismo gris)
Cadmio, el atardecer amarillo
sombra tostada
en la paleta
pensar es amar
amar es pensar
(la lluvia sola)
es muy segura la paz que se avecina.

Hay hambre en la panza del mundo,
hambre de muerte en el estómago naranja;
hay un hombre que le dice cosas al mundo con guitarra y voz
yo, aquí escribiendo para que sonrías
si estuvieras aquí te diría ven, dame la mano...
salta conmigo, aquí justo al lado del ojo derecho
existe una laguna verde como el color dicen algunos de la esperanza,
y, yo pienso que es más de la espera
y es esta espera la que acongoja imagino, porque late mucho late
aquello que llaman corazón
y explota en ondas de sensaciones cada vez que te veo,
te veo y digo cielos grises,
grises no, blanco humo
contradiciendo o, no afirmando
resulta que la confusión es ahora mi vestido,
no tú no aceptas dudas, confusiones,
debe ser blanco
olvidas que el color de mis ojos es gris
y no blanco humo,
hablo con metáforas
hablo, no, no hablo, escribo
escribo,
el reflejo de tu piel en la mia,
no, tu corazón no miente,
tu boca se escapa y en rictus de pena/alegría
silba un duende,
ya que no resulta malo, ya que no resulta bueno
que más digo,
el arroz en mi boca sabe a pena
y el miedo a que caiga
ese miedo de amanecer y voltearte a ver si vuelve el sueño
a ver si algunas hormigas se llevan los recuerdos
!Qué se las lleven! gritan los grillos
ya las veo descendiendo por el costado de mis ojos hasta la comisura de los labios
llevando agua en sus espaldas, totalmente concentradas;
ay! esto duele,no es vacuna de sarampión pero duele,
las penas serán buenas?
existe un tigre descansando bajo el monedero
tigre dedos de princesa,
calle en donde llovió
y te vió,
cuando me voy algo se queda
cuando me quedo algo se va
ese rumor de guitarra,
eso es, el rumor de guitarra
que me hace mirar hacia atrás,
abrázame tengo miedo/pena
estas lágrimas son tan largas que ya parecen falsas
tú tienes damicelas y flores, tengo,
tengo aquí un minuto para pensarte
no sé si seguir con él
creo que igual se lo llevará el tiempo
parece que hay barcos que alumbran tu pelo,
serán solo sueños que otros cuentan
o aliento de boca en los cristales,
pensaré que la luna estará llena para siempre;
como tigre espero acurrucado en cada esquina
con frío y dolor en la espalda
tocando tambores bajo la lluvia
o simplemente mirándote desde algún punto fijo
inocencia, no, culpable
me declaro culpable
y con ella asumo los dolores de este parto
y con ella asumo tambien, porque no decirlo
el olvido,
el dolor dobla las rodillas
oh! pero el alma vuela...

Latentes las horas
sobre el corazón del reloj;
en el camino las piedras son flores,
desierto de arena,
desierto de duna y gris horizonte;
los silenciosos chaucatos
ofrecen su canto de luna a la noche,
silencio, las luciérnagas
nos previenen de temblores
y los grillos en cadenas
largas y suntuosas
serpentean aquí a mi lado.

Todas las muertes se parecen,
la muerte de la hoja al caer del árbol
la muerte de la tinta al caer en una hoja,
lágrima de mujer en alguna sábana;
todas las muertes tienen cinco segundos
todas las muertes...

Todas las muertes habitan este espacio,
todas las muertes vienen cualquier día
sobre todo cuando no queremos oír;
todas las muertes le tienen miedo a esos cinco segundos
en donde simplemente se las elige.

Entre peces de colores, y
calendarios marcados con corazones
aprendi a verte sólo en libros;
tal vez alguna noche escojamos el mismo título
y yo juegue con mis zapatillas pensándote;
alguna biblioteca,
tal vez con papeles de notas
nuestras manos jugaran a escribirse,
tal vez deje algun dibujo
que te diga pienso en ti;
aquí no existen besos
puede ser alguna taza de café,
o la cabeza en alguna fría baldosa;
tal vez tu abrazo no este tan lejos,
esta noche marcaré otro corazón más en el calendario.

Vuelan las gaviotas
sobre grutas oscuras de silencio
las horas crecen como planta de maracuyá....
es invierno y afuera
las hojas de los árboles
se inquietan con el viento
en tu ventana
la luna se enreda en tu voz
algún cuadro de niña con palomas...

Bulliciosas, para tus labios
infantiles, para tu memoria
taciturnas, para tus manos
somnolientas, para tu recuerdo
las antiguas calles
lucen tranquilas
para este tiempo has de haber dejado el libro ya
has de haber mirado la luna
y asi desde tu ventana con arlequines
piensas en tierra húmeda
en papeles de escritorio
y asi
bulliciosas, para tus ojos
las calles
lloran gotas del cielo
las calles que despiden letras
que despiden colores

...

Cabizbaja y rutilante
la esfera cristal
desciende, entre aromas de jazmines
la cítara vuelve los sonidos al aire
deduce el pensamiento
increpa al viento
se vuelve silenciosa como nota de pez
enjaulado el siervo
meditado el filósofo
escrito el ciego
la esfera continua su descenso
desciende, entre musgo y cometa
coétaneos días de empedernido
avizor de letras.

nosparece

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Conciencia

Todo esta inventado
Todo descubierto
Aún me admiro del viento en tus cabellos.

V

La puerta que toca hacia adentro
no es una puerta cualquiera
es el sonido de tu voz
yendosé
la soledad crece en este vaso
tambien crece hacia adentro;
la forma oscura de tu sonrisa
te delata
no eres más que el cielo al atardecer
tu voz no expresa nada
y tus manos buscan mi cuerpo
que puedo hacer si no morir
en tu brazo
pero luego
la pregunta
y el espacio solitario al lado
tú tienes aún mi beso en tu boca
y yo tengo el cuerpo angustiado.
A veces te observo detenidamente
y me digo si te amo
y me quedo así inamoviblemente enamorada;
pero escuchando una voz lejana
vuelvo sobre mis pasos,
te sonrío
y me apeno;
existe el grito
aqui en mi garganta
luego de tu beso;
y, existe el frío
luego de tu cuerpo,
no te digo nada
es solo la sábana en mi rostro,
no digas nada
tal vez algún día nos miremos
y sigamos sin decir nada
y así los dos nos marchemos
a ese lugar de la luna que soñamos
poetas, locos, pintores
artistas, tontos
que no saben ver dentro
y es que tal vez no hay nada como dices
pero,... sigo aqui escribiendo
ya no pienso en ti, es cierto
solo dejo tu presencia a mi lado
y me digo que no estás
y así cada vez te disipas
y yo vuelo...

IV
Hilos transparentes
se mecen en líneas blancas
golondrinas, libélulas, faisanes
y un atrapasueños
verde en la ventana
la mujer sueña con él y sus manos
descubren belleza
a lo lejos la luna entera muestra su perfil
la mujer derrama una lágrima
camina, abre la puerta, y;
bajo la misma noche descubre el vestido la desnudez completa
y así decide ir a buscarle
a lo lejos él la piensa
entonces decide mojar los pies descalzos en agua
antes de conocerse
mucho antes
ambos soltaron violetas;
una tarde su corazón vibro
y el de ella supo que existía.

III

Vino, copa desmesurada de pena;
ay! como dueles gitano corazón
golpeas el pecho como martillo en madera
pequeño, leve , fuerte; tu desdén
asesina mi voz,
marcado mi pecho va con tu lágrima
no deseo verme ahora en el lago
huyo a los rayos del sol
gris espectáculo
ahora luzco;
extraño tu boca
sin embargo huyo de tu voz
ya no eres más
ya no eres más
repito y
muero con esa frase
en donde estás
a mi lado detalle de flores no hay
el frío sube
no estás
sonrío, te extraño
y espero.

Inspiracion de muchacho poeta,
de calles de piedra,
y silueta de mujer en el pecho
inspiración de constelación
de quejas
de arrullos
de mariposas;
esferas transparentes
Así en sepia, melancolía, te ves triste
y cercano algún pensamiento recorre tu boca
algún perfume se desliza en tu camisa suave y gris
mirada gaviota
mirada silencio
mirada contemplación
no abundan letras
ahora se cierne la noche para pensarte
se cierne la noche con todas sus fantasías
con todas las emociones que trae la magia
látidos apresurados de la piel.

I
El cielo tiene sus motivos rosados
A veces suelo mirarle
A veces suelo darle la espalda
Son las dudas sobre estos pies
A veces me quedo frente a una nube y envio suspiros
Mi nariz es libre
Y mis manos saludan
El cielo viene en mi alma
Tiene la motivación de los días
Y la estación en su pecho
Yo, a veces también le pido
Celeste o amarillo
Tiene el encanto de los lunes
Y suave rumor con que termina
Domingo
Son las notas celestes
Que no escapan a los latidos del cuerpo
Los días estos que te traspasan los poros
Frio, frio en el costado
Y más frio en el hueso
La madrugada trae mensajes de vidas pasadas