Y todos los colores se hicieron azul y llegó la noche... las hojas del árbol de acacia se mueven en paz y los hilillos de esperanza renacen en una nueva forma de vida... es cierto los viajantes se encuentran raras veces en el universo e irradian felicidad/esas ondas de felicidad oscilante y vespertina...
El susurro de las olas del mar, el sol feneciendo y todos dormidos esperando llegar, esperando huir para siempre... un no me mires de algodón... duerme tranquila... te veré todos los días para sonreírte...
Somos una constelación y somos el universo y luego volvemos a ser el átomo y también somos la nada... somos antagónicos y circulares como los griegos... estamos vivos y todo continúa y son agradables los sonidos del teclado y los helados compartidos con el tiempo...

Los días pasaron.. la velocidad... la rueda...el meticuloso tambor del pecho y tus ojos, maravilloso genio... me perdí en la oscuridad,descendí acompañada de una bestia oscura, ni el demonio más cruel ni la mirada más esquiva se le parecían ...sus manos eran demenciales y su naturaleza malvada; yo tuve el infierno en mi ser muchas veces, sin embargo esa noche tenía el sol entre los ojos y realmente era violento su cuerpo y sus sonidos... el tiempo se lleva todo y no distingue entre lo cálido o frío... quiero crear otra vez el cielo y su noche, los animales, el silencio, las plantas y lo humano, hacerlo todo en siete días y no descansar ninguno, permanecer lúcida todos los minutos para que no vuelva con su vapor hediondo y se nutra de mis sueños... yo tuve el infierno en mi ser muchas veces, sin embargo es anoche tuve el sol en mi ser...